Gran parte de nuestros problemas de salud se debe a la falta de sueño. Hoy se duerme poco y se descansa menos, pasamos un tercio de nuestra vida durmiendo. Si hacemos cálculos, para vivir cien años tenemos que pasar más de 33 años en un colchón. Hay personas que no prestan la mínima importancia a la base de descanso. Además nuestro entorno a diferencia de lo que ocurría hace sólo unas décadas, está cargado de radiaciones electromagnéticas que alteran el organismo contribuyendo poco a un sueño reparador.

Elegir una base de descanso es una tarea compleja, debido a la cantidad de materiales y elementos que se pueden utilizar para su fabricación. Para saber si hemos acertado en la elección, tenemos que comprobarlo a la hora de levantarnos por la mañana. Si te levantas con dolor lumbar tienes un problema de ergonomía. La incorporación de la Cerámica Photon Platinum consigue aislarnos de las radiaciones perjudiciales al tiempo que, mientras dormimos, elimina del organismo parte del exceso de lactosa, considerada principal responsable del cansancio matutino.

Nuestro peso ejerce una presión contra la superficie del colchón por lo que se necesita una cierta comodidad, que facilite la circulación. En cambio la parte ósea, en especial la columna vertebral mejora con una base firme que permita recuperar los espacios intervertebrales “discos” del esfuerzo diario. Encontrar ese equilibrio es muchísimo más importante que hablar de propiedades de materiales tecnológicos. En el caso de Corea son famosas las “ Camas de piedra Jade” donde los vendedores recomiendan añadir colchonetas de unos pocos centímetros (por comodidad).

La tecnología hace posible sustituir las pesadas losas de jade por pastillas cerámicas del tamaño de un botón. La Cerámica Photon Platinum está compuesta por la fundición de alrededor de 40 minerales, en función del fabricante, pero la base principal son: Platino, Titanio y Aluminio. La emitancia de la cerámica es bastante superior a la emisión del Jade por lo que no es necesario recurrir a las resistencias para aumentar el efecto infrarrojo. Y ¿Qué sucede si el colchón incorpora infrarrojos con una buena ergonomía? Los rayos bioinfrarrojos que producen los tejidos Photon Platinum activan las moléculas de agua de nuestro cuerpo, mejoran el nivel de oxígeno, eliminan grasas, residuos químicos y toxinas de nuestra sangre reduciendo su nivel de acidez y mejoran el flujo de sangre y el sistema nervioso. Nos aseguramos un descanso correcto y reparador. Nuestra colchón pasa a tener un valor terapéutico. Estudios de doble ciego demuestran que el tejido Photon Platinum produce una menor producción y una más rápida eliminación del ácido láctico que se acumula en el organismo.